Este boceto es mi versión de Lucrecia, la patrcicia romana que fue violada por el príncipe etrusco Sexto Tarquino. Marcó un punto de inflexión en la historia de Roma, la noble, humillada por el hecho prefirió el suicidio antes que la vergüenza de vivir ultrajada. La ira de su familia se tradujo en la expulsión de la monarquía y la implantación de la República.
Como la escultura de Marsias, el sátiro que desafió a Apolo, Mirón lo representa en el momento en que la inevitable tragedia no se ha producido, todavía puede no precipitar su final, pero el espectador sabe que está condenado. Aquí pensé lo mismo, de hecho, el padre de Lucreria tiene la postura de Marsias de Mirón. La ambientación no es romana, es propia de los pueblos godos.
Como la escultura de Marsias, el sátiro que desafió a Apolo, Mirón lo representa en el momento en que la inevitable tragedia no se ha producido, todavía puede no precipitar su final, pero el espectador sabe que está condenado. Aquí pensé lo mismo, de hecho, el padre de Lucreria tiene la postura de Marsias de Mirón. La ambientación no es romana, es propia de los pueblos godos.